Gustavo Vega, entrenador selección 3×3: «Tengo un sueño grande, quiero siempre lo mejor para Chile y me gustaría verlo en lo más alto»

El camino del básquet 3×3 en Chile no ha sido fácil. Muchos no creían en su potencial y menos que la selección podría lograr cosas importantes. A fines de mayo la selección femenina dirigida por Gustavo Vega volvió a demostrar lo contrario. Clasificaron al Mundial 2025, el segundo para las damas a nivel adulto y el duodécimo entre todas las categorías. “No nos conformamos, lo que nos mueve es seguir mejorando. Queremos lograr cosas importantes en este deporte”, afirma el entrenador en entrevista con Básquet Chileno donde repasa su llegada a esta disciplina, cómo ha sido el proceso y los objetivos que tienen con los Juegos Olímpicos en el horizonte.

COMPÁRTELO EN...
Gustavo Vega, entrenador de la selección nacional de básquetbol 3x3.

Foto: Carlos Barahona (@ojoalcesto)

“Si tú me preguntas si yo hubiese tomado esta decisión hace 10 años, yo creo que no, pero la empecé a tomar”, confiesa entre risas Gustavo Vega Prieto recordando el momento en que asumió el desafío de dirigir el 3×3 en Chile. Una modalidad del básquetbol que describe como vertiginosa y de fuertes emociones. Disciplina en la que además ha vuelto a poner al país entre los mejores equipos tras clasificar en damas al Mundial 2025 que se realizará en Mongolia.

La escuadra que clasificó al Mundial estuvo integrada por Ziomara Morrison, Fernanda Ovalle, Francisca Salvatierra y Valentina Ojeda, además de Gabriela Ahumada que fue baja de último momento por una lesión. Semanas de entrenamiento, una preparación especial en Países Bajos y luego el Clasificatorio en Azerbaiyán terminó con este histórico grupo logrando un cupo en la cita planetaria.

Luego de caer ajustadamente con Brasil (20-21) y superar a China Taipéi (21-12) en fase de grupos, las nacionales tuvieron una primera opción de clasificar al Mundial. Sin embargo, no pudieron ante una siempre fuerte selección de Letonia (12-19). No todo estaba perdido. Aún quedaba una última opción, esta vez ante Egipto. Un partido decisivo donde Chile no dudó y se llevó la victoria 21-15 y el boleto a la cita máxima del 3×3. 

“Fue algo bonito, algo que nos motiva mucho a seguir mejorando. Ahora viene un mundial que tenemos un grupo difícil y que debemos preparar de buena manera”, afirma. En Mongolia, del 23 al 29 de junio, tendrán que medirse ante Países Bajos, Estados Unidos, República Checa y Japón en el Grupo B.

El largo viaje, el cansancio e incluso la congestión por los cambios de temperatura se mezclan con la emoción del entrenador al recordar el extenso camino recorrido para llegar a posicionar el 3×3 chileno en el plano mundial. “Llegamos bien, un poco cansados, son hartas horas de viaje, pero contento y con ganas de seguir mejorando”, relata. Y es que no conformes con lograr el cupo al Mundial, al día siguiente de conseguir el objetivo volvieron a la cancha para disputar una etapa del 3×3 Women’s Series. “Lo encaramos muy bien. Jugamos con China que es una potencia en 3×3, siempre se mete entre los 4 mejores y le ganamos de muy buena forma”, señala sobre el triunfo 21-18 que consiguieron.

Sin embargo, el agotamiento se hizo notar y pese al gran nivel de las nacionales, cedieron 11-21 ante el equipo japonés de Takasaki. “Quedamos sin piernas. Era muy buen equipo. Tenía mucha movilidad, mucho físico y nos pasó la cuenta un poco. Ya era el sexto partido en tres días, así que no pudimos cerrarlo de buena forma, sobre todo en el tema ofensivo”, agrega.

Ya de regreso en Chile, en casa y con su familia, Gustavo Vega se dio un momento para conversar con Básquet Chileno, recordar su llegada a la selección, la decisión de asumir el 3×3, los obstáculos que debieron enfrentar en este nuevo mundo y las metas: “Tengo un sueño grande, quiero siempre lo mejor para Chile y me gustaría verlo en lo más alto. Este deporte apareció e iba de la mano con lo que soñamos. Cada vez estoy más comprometido con lo que estamos haciendo. No me lo esperaba, pero estoy muy feliz con el camino que vamos haciendo”.

EL INICIO DE UN LARGO CAMINO

Fue en 2011 cuando Gustavo Vega llegó a Santiago con la oportunidad de acercarse al trabajo de la selección, en ese entonces bajo la dirección de Juan Manuel Córdoba, el actual head coach. “Manu me dio la oportunidad de ayudarlo. No era asistente, pero sí podía estar acompañando los procesos, aprendiendo y aportando en todo lo que pudiera”, recuerda. Tras esto siguió vinculado a la escuadra nacional y en 2016 tomó al equipo de 3×3 que disputó los Juegos Suramericanos de la Juventud Santiago 2017.

Ese fue el primer torneo de la disciplina que dirigió, ya con éxito: “Salimos campeón con la categoría 2000 y desde ese tiempo he tomado el 3×3”. Otra pieza clave en los albores de este proceso fue la llegada en 2019 de René Navarrete, actual coordinador nacional del 3×3. “Ha sido una historia entretenida porque los dos somos del sur, los dos somos apasionados por el básquet, queremos hacer cosas por nuestro país y por el deporte. El 3×3 nos juntó para que hiciéramos todo esto en común”, recalca.

-Desde 2016 ya son varios años e imagino que todo era muy distinto a lo que es hoy día. ¿Cómo era el escenario que te encontraste en ese entonces?

-Era algo que nadie quería tomar, nadie conocía y yo asumí el desafío, me lo encargaron y empecé a especializarme. Sergio Cáceres, que es nuestro otro entrenador ahora, me acuerdo que me tradujo un paper (documento) de Serbia que encontró de cómo se armaban los equipos y todo. En ese momento trabajábamos juntos en Gigantes para Chile, que era el plan de altura, y me dijo ‘mira, encontré esto interesante’ y me lo pasó. No estuvimos trabajando juntos en el 3×3, pero sí involucrados. En ese momento me acuerdo que la elección de los equipos en Serbia era un poco distinta a lo que se hace ahora, pero más o menos buscamos poder en ese tiempo cambiar en todas las pantallas. Ellos ponían, por ejemplo, tres jugadores sobre 2 metros, nosotros no teníamos esa estatura, y uno sobre 1.90. Bajamos un poco eso, pero me acuerdo que seleccionamos tres jugadores de 1.90 o 1.90 y algo, y uno sobre 1.80. Eso nos permitió ser muy competitivos y tener esa agresividad con Pablo Campos en ese tiempo que era nuestro jugador más bajo, pero muy fuerte, muy diferente y muy valiente.

La selección de 3×3 integrada por Álvaro Pimentel, Felipe Inyaco, Pablo Campos y Kevin Rubio con la medalla de oro de los Juegos Sudamericanos de la Juventud 2017 tras derrotar en la prórroga por 13-11 a Brasil en la final.

Desde este punto Gustavo Vega comenzó a tomar más protagonismo en el 3×3 nacional junto a René Navarrete, el encargado de poner orden en la logística y lo relacionado al ranking, en ese entonces algo completamente nuevo para el entrenador:

-René era el más capacitado y de hecho, cuando me tocó dirigir, a quien le consulté fue a él. Lo novedoso de esto es que los dos creímos que podíamos hacer con Chile buenas cosas en este deporte. Con la llegada de él también fue mucho de probarnos que podíamos hacer cosas, de que confiaran. Nosotros salimos campeones en esos Juegos Sudamericanos y no pudimos clasificar a los Juegos Olímpicos. Yo le preguntaba a René ‘pero por qué no clasificamos’. Me dijo: ‘No, porque en Chile no tenemos ranking 3×3’ y a los Juegos Olímpicos de la Juventud se clasificaba por ranking. Le respondí: ‘Ya perfecto, te necesitamos luego acá porque queremos tener ese ranking’. Al final llegó en 2019, la Federación creyó en él para poder hacer este camino de mejorar nuestro ranking.

En medio de la pandemia y pese a las dificultades que existían entonces, la selección de 3×3 logró clasificar a los mundiales con todas sus categorías. Vega resalta que esto se logró con una planificación realizada por el propio Navarrete:

-Fuimos de los países que más se movió en pandemia gracias al apoyo de la Federación y de unos proyectos con el IND para potenciar esto. Por eso en 2022 fuimos de los equipos que más jugó mundiales. Jugamos mundiales en U18, U23 y en adulto, eso por ranking. Después con todos los equipos compitiendo y juntando puntajes había que ratificarlo en cancha, eso hemos estado haciendo con un camino más largo. Por ejemplo el año pasado fuimos a dos mundiales U23 que ya no se clasifica por ranking, sino que se clasifica en cancha y pudimos hacerlo con nuestros dos equipos U23 en los torneos que eran clasificatorios, los Nations League. Ha sido un camino súper desafiante y bonito de transitar, con muchas mejoras y mucho desafío. Estamos contentos, tenemos el deseo y las ganas de seguir mejorando.

-En este proceso que han tenido qué sientes tú que necesitan para dar un salto de calidad.

-Teníamos que ir mejorando de la mano porque clasificamos a los mundiales, pero no teníamos estructura para clasificar a mundiales en ese momento. Hay una parte reglamentaria de que los equipos tienen que tener dos Top 10 del ranking y después uno puede elegir a quién llevar, por ejemplo. Hay más reglamentos, pero no se puede llevar a quien se quiera. También tenemos que competir contra equipos que se están profesionalizando. La mayoría de los equipos contra los que competimos ahora son especialistas en 3×3. El ejemplo de Países Bajos que es campeón olímpico y una de sus figuras es Worthy de Jong. Él era figura máxima en básquetbol convencional y cuando vio esta posibilidad de que Países Bajos podía ir a unos Juegos Olímpico se fue de cabeza a este deporte e imagínate lo que lograron, ahora tienen medalla de oro olímpica en 3×3. Contra eso tenemos que competir, cuántos equipos dedicados podemos tener acá porque en distintos países lo que suma más ranking es eso. Es lo que estamos buscando, poder tener distintos equipos jugando estos torneos importantes. Ese camino estamos buscando y haciendo de esto algo mucho más profesional.

Las selecciones masculina y femenina que disputaron el Mundial 3×3 en 2022.

LAS CLAVES DEL ÉXITO DEL 3X3

El 3×3 ha sido ampliamente dominado por las potencias europeas y el siempre poderoso Estados Unidos, además de Canadá y China en cuanto a podios se refiere en mundiales. Sin embargo, Chile ha logrado de a poco hacerse un espacio a nivel continental y, a partir de esto, competir contra las mejores selecciones en instancias más importantes como Pre-Olímpicos o Pre-Mundiales.

Ese roce internacional es para Gustavo Vega una de las claves para que nuestro país sea cada vez más protagonista. “Poder jugar contra los mejores, medirnos y ver qué nos falta”, precisa al respecto. “Esa semana (previo a Azerbaiyán) hicimos el primer Women’s Series y lo perdimos por harto contra Países Bajos, después nos quedamos entrenando con ellos y fuimos cada vez más achicando ese espacio. Nos hicieron sentir muy incómodos. Las chicas me decían que no veían espacio en el primer partido. Después ya en el segundo fueron mejorando la ejecución y adaptándonos a esa oposición ya podíamos competir. Ha sido fundamental que podamos competir contra selecciones que no son habituales, contra oposición que no tenemos siempre, eso ha hecho mejorar mucho a nuestras jugadoras y jugadores”, añade.

Otro aspecto es que en 2022 cuando Chile clasificó al Mundial de 3×3 en sus dos primeros duelos de fase de grupos debió enfrentar a Lituania y Alemania en varones, mientras que las damas jugaron contra España y Canadá. “Son scoutings que, en lo personal, nunca me había tocado enfrentar a esas selecciones. Ahora ya es más normal (risas), es algo que vamos viendo cómo juega cada equipo. Cosas como el estilo de juego ya lo vamos reconociendo más y en relación a eso podemos armar una mejor estrategia para enfrentarlos”, explica sobre este proceso.

-¿Qué elementos han permitido al país poder posicionarse como una selección competitiva a nivel continental?

-Hay varios en cuanto a lo deportivo. Uno es que lo hemos aprendido a jugar, nos hemos podido especializar con los mejores a nivel mundial y han sido muy abiertos con nosotros. El entrenador de Serbia, Danilo Lukic, que es uno del mundo, es nuestro amigo y siempre estamos ahí consultándolo o viéndolo. Marko Zdero, que igual es entrenador de Serbia, también es nuestro amigo. De hecho en Amsterdam lo vi y estuvimos conversando harto rato. Soy bien preguntón entonces le hacía preguntas específicas en relación a nuestro equipo, de cómo jugar y siempre responde muy amablemente. De hecho le gusta lo apasionados que somos. Este es un deporte muy táctico en el que se necesitan jugadores y jugadoras muy técnicas e inteligentes. Lo hemos aprendido a jugar en relación a ver ventajas, a jugar más simple y a entender más el juego. Esto que es el básquetbol convencional se reduce a tres y la cantidad de toma de decisiones aumenta. Nuestras jugadoras y jugadores están obligados a tomar decisiones más rápidas y con más calidad. Ha sido una parte importante el desarrollo y  mejora individual de los jugadores, tener una lectura de juego un poquito más rápida y con más calidad. Así hemos podido avanzar, hemos podido jugar mucho mejor. Cada vez vamos buscando mejorar, no nos vamos quedando con lo que vamos haciendo, sino qué viene y cuál es el próximo paso. Eso se ha visto y los que han estado en el proceso lo han sentido así, es lo que nos ha permitido ir poniéndonos en este mapa.

-En ese trabajo también han ido haciendo ciclos de forma más constante a lo largo del año. ¿Qué tanto han influido estos entrenamientos en el nivel de hoy día?

-Desde mediados del año pasado ya me dedico a tiempo completo a esto, entonces hemos podido sumar jugadores más especialistas que entrenen, como tu dices, por más tiempo. Eso ha sido un plus importante para dedicarnos y entender más este deporte, para mejorar nuestras lecturas, para que los chicos tengan ese ritmo y esta oposición de juego un poquito más fuerte todos los días. Ha sido fundamental que vayan creyendo cada vez más en nosotros. Que nosotros también hemos tomado esas decisiones para dedicarnos más y que los jugadores y jugadoras vayan tomando esa decisión también ha sido muy importante porque los tenemos disponibles para entrenar, sobre todo los que están acá en Santiago. Hemos podido lograr que los jugadores y las jugadoras tengan mañana y tarde en esto, obviamente compartido con sus clubes, pero los que tienen el tiempo, también tienen el espacio para ir a entrenar planificadamente todo lo que necesitan.

-Avanzando en esta cronología, pasando de los mundiales que se jugaron en 2022, llegamos al 2023 que marca un hito completamente en el deporte, sobre todo en el 3×3 chileno con los Juegos Panamericanos que generaron un impacto fuerte en el público y dar a conocer la disciplina. ¿Qué efecto vieron ustedes deportivamente luego de esos Juegos Panamericanos y las dos medallas (plata en varones y bronce en damas) que logró Chile?

-Los efectos fueron varios. Nosotros, por ejemplo, cuando René y la Federación van a presentar los presupuestos, en ese tiempo todavía no se convencía mucho de que nuestro ranking era real (risas). En ese tiempo en los Panamericanos, que no vino Canadá, éramos segundos del ranking en damas y en varones también estábamos dentro de los tres primeros, pero estaba la duda de si ese ranking era real y cuánto nos iban a apoyar. Cuando logramos esa doble medalla, que fue un hito histórico y tremendo de nuestras jugadoras y jugadores, ratifica un poco lo que nosotros veníamos haciendo y lo realmente competitivo que podemos ser. Se hicieron dos procesos muy distintos para los dos equipos en relación a los tiempos que se tenían y logramos sacar adelante algo histórico que fue y que es maravilloso. Como te dije no nos conformamos y no nos relajamos con eso, nuestro objetivo y lo que nos mueve es seguir mejorando. Queremos lograr cosas importantes en este deporte. Entonces pasaron cosas como que para el país en ese sentido nosotros ahora somos un deporte prioritario. Son pocos los deportes prioritarios y el 3×3 pasó a ser uno, que no se hubiese conseguido sin esa doble medalla. Tenemos jugadores PRODDAR (sistema de becas para deportistas de alto rendimiento) por cuatro años, que en el básquetbol no habíamos tenido nunca, también son logros importantes. Además, el poder validar nuestro trabajo en cuanto a lo que decimos que podemos hacer, que podemos lograr y hacerlo en cancha, con un ambiente maravilloso y que pudimos dar a conocer el deporte que es muy vertiginoso, de muchas emociones fuertes. Yo he estudiado varios deportes y puedo decir que este es muy atractivo de ver y de jugar. Creemos en lo que estamos haciendo con el staff, con René y con la Federación también que nos ha apoyado un montón.

-Después vino otro momento que no terminó de la mejor manera, que fueron los Preolímpicos a París 2024 que no se logra la clasificación y está el tema de la lesión de Thiare García. ¿Cómo afectó o motivó ese proceso al grupo que, imagino, sigue trabajando por ese sueño?

-Es muy buena la pregunta porque hablas de lo que nos motiva. En ese Preolímpico habían equipos muy buenos que vienen haciendo el proceso hace tiempo también. En los dos Preolímpicos que jugamos nos pudimos dar cuenta que estamos en un nivel medio alto, que si nos dedicáramos más y con una toma de decisión de jugar esto en serio, realmente podríamos llegar más alto. Hicimos lo mejor que pudimos en cuanto a la preparación, con jugadoras no dedicadas, siempre con sus responsabilidades deportivas por delante y quedamos con muchas ganas. Todavía nos duele. O sea, esto es deporte, pero si yo le hablo a las chiquillas de eso todavía es algo que sigue ahí. Es un motor también para poder seguir mejorando. Tuvimos esa mala fortuna con Thiare, que se lesionó a los 40 y algo segundos. Ese equipo de verdad iba muy bien. Habíamos entrenado con Polonia que llegó a la final de ese Preolímpico y, con equipo titular los dos, habíamos ganado de muy buena forma en unos partidos amistosos previos. El equipo de sensaciones venía muy bien, venía afiatándose cada vez más. Hicimos una concentración en Francia, en Charleville junto al equipo donde estaba jugando Ziomara. Después nos fuimos a jugar un Stop de la liga francesa y las chicas habían ganado muy bien ese torneo. Se hizo lo mejor que se pudo hacer en ese momento y creo que lo que nos falta es ir mejorando, ir teniendo esta experiencia, tomar las decisiones que se tienen que tomar para que todo esto sea un sistema que nos permita dedicarnos a esto y tener las experiencias necesarias para poder ir mejorando y compitiendo cada vez más al nivel que queremos.

-Luego vino este Clasificatorio al Mundial que me imagino pudo ser una especie de revancha. ¿Cómo se mentalizaron en ese sentido para al Clasificatorio?

-Sí, totalmente. Creo que la parte mental fue fundamental. La preparación que hicimos fue muy buena. Las cosas no salen siempre de la forma ideal, pero lo fuimos solucionando. Se nos lesionó la Gabi a tres días del torneo y tuvimos que tomar decisiones, siempre pensando en lo mejor para ella y para el equipo, pero sí ella estaba muy determinada a lograrlo. Estudiamos a los equipos desde antes, Sergio que es nuestro entrenador hizo un trabajo genial creando una plataforma de toma de datos pero increíble. Así que fuimos sumando cada uno en su rol todo lo que necesitábamos para lograrlo. Llevamos muy escauteados a todos los equipos y nos tomamos esto con la mayor responsabilidad, creyendo siempre que se puede lograr y solucionando todo lo que había que solucionar. Fue algo bonito y que nos motiva mucho a seguir mejorando. Ahora viene un mundial con un grupo difícil que tenemos que preparar de buena manera. Le pedí a las chiquillas que ya terminando su descanso nos volvamos de lleno a lo que es la preparación. Está muy movido el año. Después de esto tenemos National League, Panamericano Junior, Women’s Series y los torneos adultos. Tenemos un año bien cargado de actividades y nos queremos ir ganando todo lo que vamos haciendo. Estamos muy mentalizados en seguir mejorando, a levantarnos rápido cada vez que caemos porque así son los procesos. A seguir fuertes con nuestras convicciones y con las cosas que queremos ir logrando.

Francisca Salvatierra, Fernanda Ovalle, Ziomara Morrison y Valentina Ojeda, la selección que clasificó al Mundial 3×3 2025. Foto: FIBA.

-Ya son 12 clasificaciones a mundiales 3×3 entre todas las categorías y el segundo mundial para las mujeres a nivel adulto. ¿Cuáles han sido las claves para poder mantenerse constantemente logrando estos objetivos a lo largo del tiempo?

-Yo creo que son las ganas de mejorar. Tenemos jugadoras y jugadores que les encanta competir. Somos muy competitivos desde nosotros como cuerpo técnico, que a veces es loco lo competitivo que somos porque con nada de historia, con nada de trabajo queremos ir y competir igual. Teniendo la paciencia para ganar porque, dentro de todo esto, también han habido varios torneos que no nos ha ido bien. Cada vez que pasan estos torneos, nos dan más combustible para hacer las cosas mejor. Los primeros National League no nos iba bien (risas). En el primer mundial logramos ganar un solo partido en cada categoría y así hemos ido mejorando, tratando de ir haciendo las cosas para que esos objetivos se vayan concretando. Creo que la disposición y mentalidad que vamos teniendo en los equipos, en esto quiero destacar a todas las entrenadoras y entrenadores de Chile que se dedican a trabajar en básquet, hemos ido haciendo que nuestras jugadoras y nuestros jugadores vayan deseando más competencia, mejorar continuamente y el pararse de igual a igual ante cualquiera. Eso es un trabajo de todos y de todas. Muy contento con cada vez que tenemos jugadores y jugadoras así, que sean el representativo de lo que somos como país y como locos que nos dedicamos al básquet porque, ustedes saben bien, quizás laboralmente siempre las condiciones no son las mejores, pero somos apasionados.

-Y en ese sentido para ti cuál viene siendo el siguiente paso tanto en esas mejoras que comentas y en cuanto a objetivos.

-Nuestra planificación va en relación al siguiente ciclo olímpico que inició este año, pero que desde el otro empieza a contar este ranking para los Juegos. Ese es un objetivo a mediano plazo, el objetivo principal y después más a largo plazo es contar con nuestro desarrollo de jugadores y jugadoras especialistas en esta modalidad que lo comenzamos con las visorias de este año. Tenemos que lograr trabajar para que nuestras próximas generaciones se vayan nutriendo y mejorando en cuanto a la especialización de este deporte, que se juegue más 3×3 en Chile. Sabemos que empezamos un poco desde adultos para abajo porque es lo que la competencia en este momento te exige, pero sabemos también desde el metodólogo que es Javier Galleguillos en el Plan Olímpico hasta nosotros en la Federación, el cuerpo técnico y René que tenemos que ir creando las bases para que este deporte se juegue mejor y sea aún más organizado. Eso es lo que vamos a desarrollar y dejo a todos invitados, a los que les apasiona competir y representar a Chile, a que se preparen para eso porque esa oportunidad, como a muchos les ha llegado, de vestirse con la camiseta de la selección, que es lo más lindo que te puede pasar como jugador, te encuentre preparado para asumir ese desafío.

-Sobre eso, hace un tiempo se anunció el tema de la liga Nacional 3×3 y el circuito Nacional, ¿cómo ha avanzado?

-Eh… René te puede responder a esa pregunta (risas). Está avanzando lento, queremos hacerlo bien. Ya se han reunido con distintos promotores de ciudades para que esto tenga un lanzamiento pronto. Va a ser por una parte el circuito a través de promotores y va a estar la liga a través de equipos y de municipalidades que quieran tomar esto. En eso estamos trabajando y estamos buscando con el circuito que se masifique esto y con la Liga Nacional cada vez más estable que hayan equipos dedicados o por lo menos especialistas en esta disciplina.

-Para cerrar, habías hablado sobre las jugadoras y me quería centrar en este grupo específico. Por un lado para ti qué significa poder dirigir a una jugadora como Ziomara Morrison, que ha sido el nombre más constante a lo largo de estos años en el 3×3, y por otro lado un poco el compromiso de parte de este grupo pensando en que tanto Ziomara, Gabriela y Fernanda fueron a este clasificatorio con sus equipos jugando las semifinales acá en Chile de Liga Nacional femenina.

-Primero creo que es una tremenda responsabilidad contar con, a mi gusto, cuatro de las mejores jugadoras del país. Es motivante, es una responsabilidad de estarnos preparando constantemente para que ese contenido y esos valores que nosotros queremos transmitir sean plasmados en la cancha. Creo que Ziomara se sumó al equipo por lo mismo. Lo que hemos conversado con ella, aparte que es una persona increíble, lo que nos mueve son esas ganas de poner a Chile en lo alto. Por eso contamos con ese compromiso de ellas. Están todas las jugadoras que dejan muchas cosas de lado. En este momento fueron las semifinales de una liga, pero ellas fueron nomás y no hubo discusión, eso se los agradezco mucho, pero también dejan muchas cosas de lado, familia y estudios, para poder representar a Chile. Eso toma más fuerza a la hora de competir, de poder representar a Chile porque realmente estamos invirtiendo cosas importantes de tiempo en esa situación. El estar preparado, el presentar un plan de trabajo serio con René y el staff, que realmente ellas sepan qué pasos hacer y hasta dónde podemos llegar, creo que es lo que más nos ha permitido tener esa credibilidad y ese compromiso que la jugadora está mostrando. No solo ellas, sino que tenemos muchas jugadoras trabajando, muchas que han pasado también y jugadores lo mismo, que quieren lo máximo para Chile. Tener jugadores y jugadoras así aumenta mucho más el compromiso de hacer esto de la mejor manera. A las chicas lo que más les motiva es esto, que Chile aparezca cada vez más en el mapa, que el básquetbol femenino en este caso siga mejorando, que el básquetbol siga siendo importante y, por qué no, el día de mañana pueda ser una verdadera fuente laboral para una jugadora, que todavía no lo es acá en Chile por lo menos. Es algo por lo que ellas se lo están jugando y creo que nos están representando de muy buena manera.

COMPÁRTELO EN...

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Básquet Chileno